- Publicado: 4 de junio de 2022


Actualmente, cualquier trabajador o empresario vive recalculando la fórmula para ser cada vez más eficiente. No es de extrañar, concentrarse en esta era, con tantas distracciones es muy difícil: notificaciones en el teléfono que no paran, anuncios que perturban nuestras intenciones al googlear algo, más todo lo que pasa a nuestro alrededor.
Concentrarse hoy en día es un reto, pero no por eso te tienes que frustrar. En este artículo te contamos cuál es la mejor fórmula que hemos encontrado nosotras para ser más eficientes.
Estudios recientes indican que el uso de las tecnologías a modo de memoria externa está modificando nuestro patrón de pensamiento.
Así pues no es extraño que entres a tu móvil buscando una información y al desbloquearlo, te distraigas con otras notificaciones hasta el punto de olvidarte para qué entraste al celular en primer lugar.
El mundo está cambiando a pasos de gigante. Más trabajo desde casa sin horarios pero pendientes 24/7 de nuestros teléfonos por si acaso, las compras en Internet, más comparación on-line antes de comprar productos o servicios. Todo o casi todo se ha democratizado pero a un costo muy alto, el de estar siempre conectados.
Si bien todos estos son factores positivos, hay otros tantos que nos hacen la vida más difícil.
¿Qué es lo que realmente nos distrae en esta era?


Como hijos del siglo XXI todos sabemos que Internet nos distrae, sea con noticias clickbait, con notificaciones o con chismes de todo tipo a través de todas las plataformas que usamos: Facebook, Whatsapp, Instagram, etc.
¿Quién no ha ido alguna vez a una parte de su casa con intenciones X, recibe una notificación por el camino que interrumpe su intención inicial y, al desbloquear el móvil, termina por olvidar lo que estaba haciendo?
Pasa más de lo que te puedas pensar, especialmente cuando tu empresa tiene un lado digital muy activo y no puedes permitirte el no contestar a los usuarios que te hacen preguntas y que necesitan inmediatez en tus respuestas.
Es por eso tan importante aprender tácticas para ser cada vez más eficientes pero, a la vez, no vivir pegados a las pantallas.
¿Qué es ser eficiente en el trabajo?
Ser eficiente en el trabajo es tener claro lo que tienes que hacer, el tiempo que te va a tomar desempeñarlo y cumplir con el objetivo marcado.
En el mundo del marketing digital es común encontrarse con marcas que quieren ser eficientes pero que no logran ordenarse con un calendario editorial que cumpla con los objetivos que se han marcado mes a mes.
Esa tarea de hábitos es un trabajo que realizamos en el Curso de Redes Sociales y Social Media de La Fábrica de las Palabras.
¿Cómo se diferencia un profesional eficiente?
Un profesional eficiente es aquél que tiene en el momento de trabajar lo hace con todo su potencial. Así pues, cuando se centra en un trabajo lo hace concentrado al 100% en él.
Así pues, con cualquier problema o conflicto que surja por el camino, al estar 100% enfocado, le será mucho más fácil resolverlo.
Además, la eficiencia en una persona se puede adivinar cuando es capaz de equilibrar el tiempo que le llevará cada detalle de su proyecto sin desperdiciar tiempo por el camino por ser perfeccionista.
Si quieres ser un empresario o trabajador con una alta productividad sigue leyendo.
Cómo ser altamente eficiente en el trabajo
1. Establece horarios de conexión a tu móvil para el trabajo y para lo que no es trabajo. Por ejemplo, si crees que 30 minutos a la mañana, 30 minutos a mediodía y 30 minutos a la tarde/noche te van a bastar para contestar a tus amigos, parientes y grupos, establece en qué horarios les vas a dar prioridad a ellos. Luego haz lo mismo con tus conexiones laborales. En la medida de lo posible establece tus horas de conexión, contesta y consulta lo que necesites y luego dedícate a otra cosa. El estar trabajando en una tarea y, a la vez, estar intermintentemente contestando mensajes te restará concentración y productividad.
2. Decide qué páginas en Internet es necesario que revises a diario y el horario para consultarlas. A veces, por trabajo necesitamos estar al día sobre ciertos asuntos pero eso puede hacer que una tarea que podríamos haber resuelto en 10 minutos nos tome horas por todas las distracciones que leer en línea puede acarrear.


3. Guarda en favoritos todo aquello que te interese leer más tarde. Si mientras consultabas tu Facebook, Instagram o la web que sea, apareció un artículo interesante que es mejor que no leas ahora por estar concentrado en otro asunto, guárdalo en ver más tarde y revisa su perfil cuando tengas tiempo para leerlo con tranquilidad.
4. Trabaja en períodos de 40-50 minutos y descansa. No es lo mismo el rendimiento que puedas tener los primeros minutos de trabajo que al cabo de horas. Por más que te guste lo que estás haciendo, es normal que después de un tiempo agradezcas una distracción. Descansa a menudo y dedícate a otras cosas en otro lugar distinto al de tu trabajo.
5. Desconecta las notificaciones de tus apps: cuantas menos tentaciones para entrar al móvil, mejor para tu productividad.
6. No escribas a nadie amigo o pariente por la mañana: los grupos, los familiares y los amigos suelen activarse hacia el mediodía. No despiertes el monstruo antes de las 12 pm. Déjales que sean ellos los que te contacten a ti y todo lo que necesites organizar con ellos hazlo la noche anterior. La curiosidad mata tu productividad: si antes de ponerte a trabajar escribiste a tu hermana para saber si podía tomar un café contigo esta tarde, estarás alerta hasta saber la respuesta.
7. Usa el modo avión: no tengas miedo de usarlo cuando escribas, cuando necesites tu creatividad para hacer lluvias de ideas o cuando necesitas concentrarte por el motivo que sea. El mundo puede pasar sin ti durante 30 min o una hora sin que llegue a explotar.
8. Di no a nuevas redes sociales: obviamente, tendrás que hacerlo inteligentemente. Por ejemplo, si trabajas en el mundo de la política borrarte de Twitter no será una buena jugada, ya que allí hay mucha información en tiempo real que puede servirte para el día a día de tu trabajo. Sin embargo, si las opiniones mojigatas de Facebook o las fotos ególatras de Instagram te molestan y no las usas productivamente para nada, bórrate.
9. Revisa tu email a determinadas horas del día: este punto es muy similar al punto número 1 pero en versión email. Si eres empresario, es probable que el trabajo te llegue a todas horas y eso te distraerá de tu verdadero objetivo: hacer crecer el negocio. Así pues, para evitarlo, decide a qué hora vas a mirarlo y con qué asiduidad para que no te esclavice y mate otras actividades.
10. Usa agenda y bloc de notas físico: anotar en tu agenda digital puede llevarte a otras distracciones. Consigue una agenda y anotador que te guste porque va a ser tu gran amigo durante todo el año.
Ser efectivo significa tener también tiempo para el resto de cosas que nos ocupan en el día: ducharte, lavar los platos, preparar la comida y sacar al perro, por ejemplo. Encontrarte con amigos físicamente, leer un libro, hacer gimnasia te ayudará a tener más perspectiva sobre tu trabajo diario. De todos modos, aunque como dije al principio todo estamos siempre en busca de más productividad, es importante plantearse los porqués y para qué de lo que hacemos en nuestro día a día, ya que si estamos presos de la productividad corremos el riesgo de perder nuestra libertad que es el mejor regalo que tenemos.